Una de mis combinaciones favoritas a la hora de decorar una habitación femenina de bebé es la del gris con el rosa. Ambos son, en sus tonos pastel, perfectos para favorecer el descanso infantil.
El gris aporta la base neutra ideal para jugar con el color rosa como complemento. La elegancia y sosiego del color gris se ve contrarrestada con el punto alegre y vital que aporta el color rosa. Y si además utilizamos el color blanco, por ejemplo en el mobiliario, conseguiremos “la combinación perfecta”. Claro está que es mi opinión, pero lo mejor de todo es que según sea nuestro mobiliario y los complementos que utilicemos conseguiremos recrear un ambiente tradicional o actual acorde a nuestros gustos.
Veamos algunos ejemplos.
En la imagen de portada el gris combinado con el zócalo blanco ocupa las paredes del dormitorio y el rosa se utiliza en los textiles y complementos decorativos aportando el color y dinamismo al espacio.
Los complementos mantienen la combinación de colores, así siempre se guarda una línea uniforme sin excesivos contrastes.
En este otro ejemplo el contraste es mucho más sutil por las gamas de colores utilizadas. Fijaos en el móvil sobre la cuna con sus pequeñas mariposas revoloteando. Ya vimos cómo hacer uno en este artículo, ¿lo recuerdas?
Generalmente el gris se utiliza más en las paredes y si vas a cubrir la altura entera del paño, ¿qué te parece este mural en blancos y rosas? Sencillamente perfecto
Esta foto ya la he puesto antes para el tema decorar con el nombre del niño, pero es otro perfecto modelo para el artículo de hoy. Destacaría las rayas horizontales en la pared principal y la intensidad de algunos detalles en fucsia.
Y estas últimas
Creo que ha quedado patente que es una combinación ideal de colores, ¿verdad?
¿Te gustaría utilizar el gris y el rosa para decorar la habitación de tu bebé? Compártelo con nosotros y con tus amigos.
¡Hasta pronto!